Las señales de advertencia de peligro son cruciales en las carreteras, alertando a los conductores sobre condiciones potencialmente peligrosas. Estas señales, con sus colores vibrantes y pictogramas específicos, comunican riesgos como curvas pronunciadas, cruces de animales o zonas de obras. Su presencia permite a los conductores anticipar y ajustar su velocidad, garantizando así la seguridad vial. Respetar estas señales no solo es una obligación, sino también una medida fundamental para prevenir accidentes y preservar vidas.